Me llama mucho la atención el comportamiento innato de estas aves; sus increíbles viajes, sus travesías y su curso de reproducción, en fin todos sus procesos instintivos que maravillan al mundo entero.

¿Sabía Usted que el 2 de Octubre se celebra el día mundial de las aves migratorias?
Sí. Se celebra la existencia de estas aves que son una riqueza biológica, uno de los tantos atractivos naturales que embellecen nuestro entorno, nuestro mundo. Muchas de sus especies son nuestras visitantes por un período de tiempo; ellas acompañan a los forasteros que recorren los parques, caminos, senderos, humedales y reservas naturales. Las aves migratorias son muy importantes para el buen funcionamiento de los bosques , rastrojos, manglares, pantanos y playas, pues ellas se alimentan de peces, gusanos, cangrejos, insectos, semillas y plantas; muchas son un verdadero dolor de cabeza para los campesinos, porque viven en constante lucha para que ellas no se coman sus cultivos. Sin embargo de esta manera, mantienen el equilibrio de la naturaleza. La migración de las aves es un término que hace referencia a los viajes estacionales en los que de forma periódica hacen parte multitud de especies de aves.

Las aves migratorias emprenden vuelo desde la región boreal y templada, hasta las regiones tropicales. Permanecen en los trópicos durante 6 meses para regresar de nuevo al norte, durante la época reproductiva. Pueden atravesar territorios continentales. La migración en una sola dirección puede durar desde varias semanas hasta cuatro meses; la logran en una serie de vuelos que duran desde algunas horas hasta varios días. Entre un vuelo y otro, las aves migratorias hacen escala para descansar, alimentarse y llenarse de energía.

Esta actividad puede tardar unas cuantas semanas y son motivadas por una especie de reloj biológico o mecanismos fisiológicos que determinan funciones biológicas muy complejas. El reloj biológico actúa sobre su sistema hormonal advirtiendo el momento indicado para mudar su plumaje, para su reproducción y obviamente para su migración.

Estas aves, son maestras de la navegación. Para llegar a su destino deben conocer la dirección en la que van a volar. Deben orientarse y reconocer su destino final. Para esto utilizan tres brújulas.: la magnética, el sol y las estrellas. Algunas especies se guían por su vista, oído y olfato .Hay aves que migran unos cientos de metros, como hay otras que recorren el mundo entero, orientadas por la brújula biológica como son las pistas terrestres; cuando su guía son las cordilleras, los ríos, las costas. Sus otras brújulas son el sol y las estrellas; las aves se encargan de rastrear los ciclos de la luz y la oscuridad. Usan las sombras del sol para lograr orientarse cuando no lo ven, por tener días nublados. También hay muchas especies que viajan durante la noche y son guiadas por los astros, generalmente se guían por la estrella polar o por grupos de estrellas incluso se guían también por la luna. (Qué seres tan inteligentes y maravillosos, naturaleza divina). Según muchos científicos que están dedicados a estudiar estas naturalezas, los ojos de las aves tienen unos pigmentos o especie de radar; que absorben luz y que les permite orientarse. Algunas aves tienen magnetitas en el cerebro y en el pico; perciben el campo magnético de la tierra para orientarse. Muchas aves migratorias llegan a su destino con una precisión impecable tras recorrer largas distancias y bajo todo tipo de condiciones climáticas.

Colombia, el país de las aves, es un paraíso que posee el mayor número de especies de aves en el mundo. Todo gracias a la posición geográfica, la variedad topográfica y la riqueza agrícola de este país. Se han identificado 13 especies migratorias aproximadamente que pasan su temporada invernal en los parques, lagunas, bosques nativos, humedales, jardines de casa , zonas rurales y urbanas , que les permite alimentarse, descansar y reproducirse.

El fenómeno de la migración es de suma importancia porque las aves migratorias actúan como indicadores de la salud en los ecosistemas y en la diversidad biológica. Sin embargo, el cambio climático proporciona grandes beneficios ecológicos a los ecosistemas.

La tala de árboles, los efectos del cambio climático, la pérdida de humedales, de quebradas y el secamiento de ríos, están degradando el hábitat de muchas especies. Las aves que antes eran migratorias, se han convertido en sedentarias debido al calentamiento global.

El ruiseñor se niega a anidar en la jaula, para que la esclavitud no sea el destino de su cría
Khalil Gibrán