Dos activistas ecologistas pertenecientes al grupo “Just Stop Oil” arrojaron sopa de tomate sobre el cuadro ‘Los Girasoles’ de Vicent Van Gogh, exhibido en la National Gallery de Londres, para protestar contra la explotación de yacimientos de combustibles fósiles en Reino Unido.

Las activistas se plantaron frente a la obra y arrojaron sobre ella la sopa, para acto seguido pegar sus manos a la pared. “¿Qué vale más? ¿El arte o la vida?”, “están más preocupados por la protección de una pintura que por la del planeta”. Asi mismo, piden que no se otorguen más concesiones para extraer petróleo mientras el gobierno británico negocia una nueva ronda de permisos. Adicionalmente, dicen “Sigan dándonos petróleo y gas nuevos, y seguirán recibiendo sopa”.

Por otro lado, dicen que detener las concesiones para la exploración y producción de combustibles fósiles es el primer paso para asegurar nuestra supervivencia. Dicen “Ya tenemos más petróleo y gas del que podemos permitirnos quemar”, señalan en su página “La crisis del costo de vida está impulsada por los combustibles fósiles: la vida cotidiana se ha vuelto inasequible para millones de familias hambrientas y con frío, que ni siquiera pueden darse el lujo de calentar una lata de sopa. Mientras tanto, las cosechas están fallando y la gente está muriendo en monzones sobrealimentados, incendios forestales masivos y sequías interminables causadas por el cambio climático. No podemos costear el petróleo y el gas nuevos, se va a llevar todo. Miraremos hacia atrás y lamentaremos todo lo que hemos perdido a menos que actuemos de inmediato”, expuso el grupo activista en un comunicado sobre estos hechos.